ORO COMESTIBLE EN SPRAY

POR Karini Apodaca

El oro se ha empleado desde la antigüedad como símbolo de poder, éxito y realeza. Es puro, valioso, resistente, inmortal.  Su eterna seducción ha fascinado a todas las culturas que han poblado la Tierra. Utilizado como adorno, complemento, ungüento, elixir, perfume y alimento, sus propiedades lo convierten en un verdadero tesoro.

Hoy hablaremos del oro comestible en aerosol. Producido por las firmas TSUKIOKA CO LTD de origen japonés y CHARRIER de origen francés, ambas firmas elaboran su aerosol con un 99% de polvo de oro puro de 23k, el producto se cotiza al precio del metal que oscila entre 1,600 a 1,700 dólares la onza.

El oro comestible en láminas, polvo, ojuelas o aerosol, es generalmente usado en la decoración de chocolates, postres y bebidas. En la industria alimenticia el oro es conocido como el aditivo E-175. Si bien, no está considerado dentro  de nuestras requisiciones alimentarias, éste metal  no tiene ningún efecto nocivo sobre el organismo, se trata de un elemento lo suficientemente inerte como para generar alguna reacción adversa en su trayecto por nuestro tracto digestivo.

HISTORIA DEL ORO EN LA GASTRONOMÍA

La singular relación del oro con el organismo humano era ya conocida en el antiguo Egipto donde se fabricaban panes de forma cónica que contenían oro, a los cuales se les conferían poderes mágicos;  y en India sus habitantes añadían sales de este metal a sus platos, por considerar que les proporcionaría suerte y salud.

Este metal fue codiciado en todas partes, pero lo fue aún más en el Lejano Oriente en donde además de usarlo como moneda se le empleaba como medicina y alimento, para tal efecto el brillante metal era espolvoreado sobre las viandas.

Los banquetes del Medievo así como del Renacimiento se caracterizaron por su ostentación y no podría faltar el oro en ellos, empleandose como cobertura en esculturas a base de mazapán y formaba parte de una extensa variedad de postres.

Uno de los banquetes más llamativos de esa época es el que ofreció Benedetto Salutati a Fernando I de Nápoles en 1476, durante el servicio se sirvió un pastelillo de piñones y dulce de leche espolvoreado con hojuelas de oro.

TENDENCIAS.

En la edad moderna no se abandonó el uso del oro en el arte gastronómico, por el contrario, el metal que simboliza poder y riqueza se hizo presente en el campo de los licores. En 1598 la casa Der Lachs fue fundada en Danzig, Alemania, se dio a la tarea de crear un licor de oro que se produce y comercializa hasta nuestros días.

Por supuesto que México no se queda atrás en las modas culinarias, ya que hace algunos años la exitosa pintora y gastrónoma Martha Chapa diseñó un espectacular menú para celebrar la obra de un reconocido pintor mexicano, en la ciudad de Viena, aquel lujoso menú incluía un platillo de enchiladas rellenas de huitlacoche, en el cual las tortillas fueron reemplazadas por finas hojas de oro.

Ahora se ha dado un paso adelante bastante interesante. La presentación en spray permite pintar completamente un alimento, que de verdad parece completamente de oro.

La cena que se servirá a los artistas que acudan a la gala de los Premios Globo de Oro el próximo 15 de enero del 2012, marcará ésta fuerte tendencia al decorar los postres con un baño de copos de oro comestible de 23 quilates. Según informa la agencia de noticias Reuters.